El changarín que mintió o la historia del pastor mentiroso

A raíz de la historia de José Sánchez ”el changarín de Nogoyá” se me ocurre la siguiente reflexión: ¿cuánto de esta mentira, está en realidad mostrando, de una manera poco feliz, la necesidad básica del ser humano de ser amado, reconocido, la necesidad de existir, de ser alguien?

Y siguiendo con este razonamiento pienso, ¿cuántas veces sostenemos mentiras frente a otros o incluso nos mentimos a nosotros mismos creando identidades o mundos de fantasía que nos mantienen operando en un mundo que no existe y desconectados de la realidad?

Todos necesitamos pertenecer y ser amados pero cuando esta pertenencia esta sostenida por una mentira el precio que pagamos es muy alto: pagamos con nuestra propia libertad.

La valentía de reconocernos, validarnos y aceptarnos tal como somos, con nuestras fortalezas y nuestras flaquezas, con nuestros aciertos y nuestros errores es el punto de partida fundamental que nos permite construir relaciones sanas y vidas reales y con sentido. Si no, al igual que el pastor mentiroso, corremos el riesgo de quedar atrapados en nuestra propia trampa y un día darnos cuenta que ya no recordamos lo valiosos que en verdad somos gracias a nuestros dones y talentos y también a nuestras vulnerabilidades.

Cuento del «Pastor mentiroso»

Un joven pastor que cuidaba de su rebaño de ovejas en las cercanías de un pequeño pueblo. Un día se le ocurre hacer una broma a los habitantes del lugar, así que acude al sitio alarmado gritando que se había encontrado con un lobo, y que sus ovejas corrían peligro. Esto preocupó a todos los habitantes, que se dispusieron a ayudarlo. Corriendo, lo siguieron hasta el lugar en donde había avistado al supuesto lobo, pero solo se encontraron con la burla del joven. Enfadados por la mentira regresaron hasta el pueblo. El lobo, sin embargo, sí se le apareció al pastor un día, y este volvió a acudir al pueblo para pedir la ayuda de los vecinos pero, debido a que estos imaginaron que se trataba de otra broma pesada del pastor, decidieron no ayudarlo. El cuento finaliza con el lobo comiéndose unas cuantas ovejas y llevándose otras para la cena, sin poder defenderse. Parecen existir otras versiones más dramáticas, donde el lobo se come todas las ovejas e incluso al propio pastor.

Moraleja

La enseñanza de esta obra literaria es la defensa del valor de la sinceridad, porque un mal uso de esta, puede hacer llegar a perder la credibilidad. El pastor llega a perder la credibilidad, por el abuso de la presunción de buena fe de sus conciudadanos, provocándole un grave perjuicio a su rebaño, dañando su fuente de subsistencia económica, además de una pérdida sentimental. **El pastor mentiroso es una fábula atribuida a Esopo.

«Nadie cree a un mentiroso, ni siquiera cuando dice la verdad»

Por Karina Cavalli, Terapeuta Bioenergética con más de 30 años de experiencia trabajando para empresas y particulares. Para más información ingresar en www.karinacavalli.com

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